
Las principales áreas (o zonas) de pesca de la FAO son una clasificación de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura que divide las masas oceánicas del globo en sectores pesqueros. El establecimiento de las principales áreas de pesca de la FAO obedece a la necesidad de obtención de datos estadísticos, la gestión pesquera y propósitos jurisdiccionales. Los límites de estas áreas fueron establecidas atendiendo a las consideraciones de agencias internacionales de pesca.
La división creada permite clasificar todas las capturas que se realizan en el mar según el sector pesquero del que provengan, algo que facilita elaborar estadísticas sobre pesca y tasas, que son clave para la toma de decisiones en la industria mundial de la pesca.
La FAO estableció estas diferentes zonas (19 oceánicas y 7 continentales) y les asignó una numeración específica para poder diferenciar cada zona y sus subzonas con la idea de poder identificar cada pequeña zona de cada uno de los océanos, mares y masas acuáticas del planeta.
Al dividir los mares en zonas muy concretas, otro de los efectos conseguidos es llevar un control exhaustivo de la actividad pesquera, cada zona FAO tiene sus límites de explotación, sus propios métodos de pesca definidos y permitidos y sus cuotas de captura que dependen de los países bajo la jurisdicción de cada zona. De esta manera, sabiendo el número de la FAO de la que proviene un pescado, podremos saber exactamente su origen (desde el año 2014 es obligatorio que en el etiquetado de todo producto del mar conste su zona FAO de origen).